Las propiedades del ginseng.
Las principales propiedades de la raíz de Ginseng se deben a su alto contenido en ginsenósidos, unos principios activos antifatiga específicos de la familia de las saponinas (ginsenósidos Rg1 liposoblubles), estimulantes del sistema nervioso central.
El Ginseng pertenece a la familia de las plantas adaptógenas: según el estado fisiológico del organismo, su acción puede ser estimulante o calmante para responder a la falta o al exceso de estímulos.
Principales propiedades:
Estimula la energía.
Algunos componentes del ginseng, como los polisacáridos, ayudan a luchar contra el estrés oxidativo y a incrementar la energía del cuerpo.
Mejora el rendimiento sexual.
El ginseng se ha utilizado durante miles de años en China para aumentar el deseo sexual.
Aumenta la concentración y la memoria.
El ginseng ayuda a mejorar ciertas funciones cognitivas, como la concentración y la memoria.
Los beneficios del ginseng.
Numerosos estudios* efectuados en personas ponen de relieve las propiedades antifatiga del Ginseng a nivel físico, intelectual e incluso sexual. Permite una mejor adaptación a las situaciones de estrés.
Revitalizante y energizante, el Ginseng incrementa la resistencia física e intelectual, mejorando la adaptación del organismo al esfuerzo. El Ginseng mejora el uso del oxígeno por parte de los músculos y limita la formación de ácido láctico, factor que limita el rendimiento muscular. El Ginseng ayuda así a atenuar la sensación de cansancio después de un esfuerzo.
El Ginseng, al reducir la sensación de fatiga, mejora también el rendimiento físico e intelectual. El resultado es una mayor eficacia y una mejor concentración.